mis labios te sueñan
mas mi corazón te invoca
no preguntes a él
cuánto de ti anhela.
Crepúsculo florido
tu piel de seda
solloza en la mía
dulces gotas de rocío,
y al son de un ocaso
un lucero ya alumbra
nuestra pasión en penumbras
bebiéndose en un albor
nuestro ardiente temblor.
Autor: Jorge Aimar Francese Hardaick
- Argentina - 08-08-2016
Derechos reservados del autor (*)
Blog "MIS PENSAMIENTOS"
http://crisfacu.blogspot.com.ar